sábado, 22 de agosto de 2009

Desde tu boca a mi boca...

Desde tu boca llegó mi aliento...
Desde tu aliento llegó mi inspiración...
Desde tu inspiración llegó mi imaginación...
Desde tu imaginación llegó mi fantasía...
Desde tu fantasía llegó mi ausencia...

Comenzaste siendo mi sueño, aquél lejano objetivo de mi deseo. Aquella primera vez te miré y te llamé como siempre lo he hecho, pero ésta vez si escuchaste...

Había aprendido muy bien cómo mirar, pero ésta vez me volteaste a ver. No sólo volteaste, sino también te acercaste. Fué cuando me dí cuenta que no sabía qué hacer en el momento en que supieras de mi existencia...

Te llamé por primera vez de nuevo, sólo éso fué suficiente para no volver a necesitar llamarte. Tanto tiempo llamándote y ahora me escuchas...

Desde ese momento comenzamos a llamarnos entre los dos. Aprendí de ti; aprendí a pensar de una nueva perspectiva; aprendí que no sé lo que realmente quiero; aprendí que lo que siempre creí que me hacía falta, realmente no lo necesitaba; aprendí que a mi me gusta ser quien busca, no ser buscado...

Y continuaste llamándome, y comencé preguntándome...
Y continuaste preguntándote, y comencé asegurándome...
Y continuaste asegurándote, y comencé decidiéndome...
Y continuaste decidiéndote, y comencé planeándome...
Y continuaste planeándote, y comencé alejándome...

Fuí yo, yo lo comencé, yo te enamoré, yo te dí momentos felices, yo te otorgué la esperanza, yo te di alas, yo te dejé caer, yo te hice llorar... Yo te causé tanto dolor...

-Ahora los dos estamos sólos de nuevo, tú sueñas una vida conmigo, y yo sueño una vida sin ti, no seas cruel, no te hagas daño, hay muchos mejores que yo para ti... disfruta de mi ausencia-